Por Jesús Ruiz Jiménez
La Gran Señora, enlutada; la Gran Reina, Dolorosa; La Virgen de la Capilla, Socorro; el Gran Socorro de San Pedro Mártir, Emperatriz.
Todo cabe en tu Hermosura, Señora, Reina, Dolorosa, Capilla, Socorro, Emperatriz, todo en su más rotundo sentido. Soberana del Viernes, Aroma de Septiembre, Pañuelo de Duelo. Recogimiento de mirada apesadumbrada, ojos que son mares inmensos de pena, zozobra, tristeza pero a la vez paz, consuelo, sosiego, Socorro, sí, Socorro para nuestra apesadumbrada ánima, Socorro para nuestras cuitas, Socorro para nuestros miedos, Socorro para nuestra oscuridad, Socorro para nuestra miseria, Socorro para tus Hijos. Socórrenos Señora, Madre de Jesús Nazareno, ampáranos siempre bajo tu infinita mirada, arríbanos a buen puerto, alumbra nuestras noches como alumbra tu luz en la más abismal de las oscuridades, Señora, Dolorosa, Reina, Emperatriz, Pañuelo de llantos, Soberana, Virgen de la Capilla, Socórrenos y llévanos a Jesús por Siempre.
