25 enero 2010

Celebrado el tradicional desfile de moda

 


El pasado sábado 23 de enero se celebró, con una notable asistencia de público, el tradicional desfile de moda benéfico que cada año organiza la Venerable Archicofradía de Ntro. Padre Jesús Nazareno, para recaudar fondos destinados a la obra de reconstrucción de la Iglesia de San Pedro Mártir.

En esta ocasión los niños protagonizaron el evento, pues fueron los encargados de presentar como modelos la nueva colección primavera-verano de la firma GOCCO, cuya franquicia de Lucena se ha volcado con este acto.

Los más de mil asistentes pudieron degustar numerosas tapas, así como dar cuenta de las diez paellas que a tal efecto habían preparado colaboradores habituales de la Archicofradía.  

A la conclusión del acto, nuestro Hermano Mayor, Eduardo Cortés, impuso una insignia de la Archicofradía a Luís Lara, gerente de GOCCO Lucena e hizo entrega de un ramo de flores a Pilar Cantero, máxima responsable de la organización del desfile.



13 enero 2010

Otra forma de cantar el Miserere

El Miserere y su posible traducción

Salmo 50
Miserere mei Deus 


(En negrita la parte que recita el coro) 


Miserere mei, Deus,
secundum magnam misericordiam tuam.

Et secundum multitudinem miserationum tuarum,
dele iniquitatem meam.

Amplius lava me ab iniquitate mea:
et a peccato meo munda me.

Quoniam iniquitatem meam ego cognosco:
et peccatum meum contra me est semper.

Tibi soli peccavi, et malum coram te feci:
ut justificeris in sermonibus tuis, et vincas cum judicaris.

Ecce enim in iniquitatibus conceptus sum:
et in peccatis concepit me mater mea.

Ecce enim veritatem dilexisti:
incerta et occulta sapientiae tuae manifestasti mihi.

Asperges me hyssopo, et mundabor:
lavabis me et super nivem dealbabor.

Auditui meo dabis gaudium et laetitiam:
et exsultabunt ossa humiliata.

Averte faciem tuam a peccatis meis:
et omnes iniquitate meas dele.

Cor mundum crea in me, Deus,
et spiritum rectum innova in visceribus meis.

Ne projicias me a facie tua:
et spiritum sanctum tuum ne auferas a me.

Redde mihi laetitiam salutaris tui:
et spiritu principali confirma me.

Docebo iniquos vias tuas:
et impii ad te convertentur.

Libera me de sanguinibus, Deus, Deus salutis meae
et exsultabit lingua mea justitiam tuam.

Domine, labia mea aperies:
et os meum annuntiabit laudem tuam.

Quoniam si voluisses sacrificium, dedissem utique:
holocaustis non delectaberis.

Sacrificium Deo spiritus contribulatus:
cor contritum et humiliatum, Deus, nos despicies.

Benigne fac, Domine, in bona voluntate tua sion:
ut aedificentur muri Jerusalem.

Tunc accetabis sacrificium justitiae, oblationes et holocausta:
tunc imponent super altare tuum vitulos.

------------------En Castellano una traducción podría ser esta--------


Ten misericordia de mi, oh Dios:
conforme a tu gran misericordia.

Y conforme a la multitud de tus piedades,
borra mi maldad.

Lávame enteramente de mi culpa,
y límpiame de mi pecado.

Porque yo conozco mi maldad,
y mi pecado está siempre ante mis ojos.

Contra ti solo he pecado, y hecho lo malo delante de ti:
porque te justifiques en tus palabras, y venzas en tu juicio.

He aquí que en iniquidades fui engendrado,
y en pecados me concibió mi madre.

He aquí que amas la verdad:
me has manifestado los misterios y secretos de tu sabiduría.

Rocíame con hisopo y seré limpio:
lávame, y seré emblanquecido más que la nieve.

Hazme oir el gozo y la alegría,
y saltarán de placer mis huesos apocados.

Aparta tu rostro de mis pecados,
y borra todas mis iniquidades.

Crea en mi, oh Dios,
un corazón puro y renueva dentro de mi un espíritu recto.

No me eches de tu presencia,
y no quites de mi tu santo espíritu.

Devuélveme el gozo de tu salvación,
sosténgame un espíritu de príncipe.

Enseñaré a los pecadores tus caminos,
y los impíos se convertirán a ti.

Líbrame de toda sangre, oh Dios, de mi salud,
y cantará mi lengua tu justicia.

Señor, abrirás mis labios,
y mi boca anunciará tu alabanza.

Porque si hubieras querido sacrificio, yo lo hubiera ofrecido:
mas no te serán agradables los holocaustos.

Para Dios es sacrificio un espíritu atribulado:
el corazón contrito y humillado, oh Dios, no lo despreciarás.

Haz bien, oh Señor, con tu buena voluntad a Sión:
para que sean edificados los muros de Jerusalén.

Entonces aceptarás el sacrificio legítimo, las ofrendas y holocaustos:
entonces ofrecerán sobre tu altar becerros.